¿Empacho de clásicos?

Tendrían que coincidir muchos factores y darse un cúmulo de situaciones muy variadas, pero si finalmente acabara ocurriendo podríamos llegar a ver, entre el 23 de marzo y el 11 de abril, ¡9 enfrentamientos Barça - Madrid! Ayer después de la grandísima victoria del Regal Barça en el AOKA, estuve oyendo por la radio que si la diosa casualidad se encaprichaba, podríamos llegar a ver hasta 9 clásicos en muy pocos días. Voy a explicar eso. Una vez finalizado el partido de los azulgranas en Atenas, se empezó a especular sobre si el Barça quedaría primero o segundo de grupo y que rival le podía tocar en cada caso. Como el grupo del Regal FCBarcelona se cruza en cuartos con el del Madrid, si uno pasa como primero y otro como segundo clasificado tendríamos una eliminatoria entre ambos equipos al mejor de 5 partidos que se disputarían entre el 23 de marzo (el primero) y el 7 de abril (el quinto, si fuera necesario por un empate a 2 en los 4 encuentros anteriores). Mientras tanto, y suponiendo que Barça y Madrid superasen a Stuttgart y Lyon respectivamente, el sorteo de los cuartos de final de la Champions League podría deparar otros dos enfrentamientos (ida y vuelta) entre ambos clubes que se jugarían el 30 ó 31 de marzo (ida) y el 6 ó 7 de abril (vuelta). A todo esto las competiciones domésticas de cada sección seguirán su curso natural y, esto si que lo podemos asegurar, el día 10 ó 11 de abril se disputarán los encuentros ligueros entre Madrid y Barça tanto de fútbol (jornada 31) como de baloncesto (jornada 29). Recapitulemos: 5 partidos de Euroliga + 2 de Champions + 1 de Liga BBVA + 1 de Liga ACB = 9 encuentros entre los dos históricos en tan solo ¡19 días! De locos. Ya veremos como evolucionan los resultados de los cuatro equipos (dos de cada club) y también esperaremos a ver qué nos depara el sorteo de cuartos de la Champions si finalmente los dos conjuntos futbolísticos vencen a sus rivales en octavos de final, pero la verdad es que sería algo nunca visto el que se llegaran a disputar todos los encuentros comentados y los seguidores de ambos equipos lo pasaríamos en grande. Lo que no tengo tan claro es que esto les gustara a los aficionados al fútbol y/o baloncesto ajenos a Barça y Madrid, pues a pesar de estar hablando de los 2 mejores clubs de Europa actualmente (tanto en fútbol como en basket) quizá los que no siguen con especial ímpetu a estos dos equipos, se hartarían de verlos hasta en la sopa… si no se han hartado ya.

Sobresalir dentro de un bloque ganador

Cuan difícil es ser parte de una plantilla competitiva y destacar por encima del resto. Ya sea por trabajo, entrega, talento, esfuerzo… da igual, cuando un equipo funciona como un reloj suizo y todos sus componentes tienen una participación ecuánime en cuanto a tiempo de juego, es casi una misión imposible ser una referencia única de forma regular. Te puede salir un partido buenísimo y ser el mejor ese día, pero es muy probable en el siguiente encuentro sea un compañero tuyo el que se ‘casca’ el partidazo de su vida, mientras que el resto del equipo hace su trabajo a las mil maravillas pero nadie destaca por encima de sus compañeros en cuanto a números. Una suma de factores, eso es el Regal Barça, un equipo en el que ser el baluarte del equipo ya no está garantizado ni para el gran Navarro, pero en el que todos los componentes se compenetran a la perfección y actúan como un verdadero equipo. Las individualidades ya se verán cuando un partido se trabe, o se ponga cuesta arriba, pero de momento premia el conjunto. Aunque lo más sorprendente del caso es que sí hay un jugador que consigue destacar y mantenerse regular: Fran Vázquez. Ayer por fin se le pudo reconocer su gran labor dentro de este equipo, cuando se le otorgó el MVP de la Copa, un galardón que había merecido con creces el gallego tras su gran actuación en los tres encuentros de la Copa. Si, en los tres. 6 puntos, 3 rebotes, 1 robo, 1 tapón y 1 mate ante Cajasol para 8 de valoración en tan solo 11 minutos en pista; 16 puntos, 6 rebotes, 1 asistencia y 3 mates ante Power Electronics para 19 de valoración en 19 minutos; 14 puntos, 4 rebotes, 2 robos, 1 tapón y 4 mates en la final ante el Madrid para 18 de valoración en 18 minutos. En total, 87% de efectividad en el tiro de 2 (tan solo 2 lanzamientos fallados), 8 mates y una media de 12 puntos por partido… en tan solo ¡16 minutos! Ese es el tiempo medio que ha estado Fran en pista. En cualquier otro equipo este minutaje sería propio de un jugador que cuenta poco para su técnico, pero no es el caso del Regal Barça. El propio Ricky, gran fichaje del equipo para esta campaña, ha promediado tan solo 22 minutos en pista en los 3 partidos de Copa, que para un base titular es muy poco. Pero así es como Pascual dosifica a sus jugadores y les hace ver la importancia del bloque. Además, en el caso del gallego la competencia en su puesto es altísima. Los fichajes de Morris, Lorbek y Ndong hacen que la pintura este muy disputada, y que todos se esfuercen al máximo para conseguir más minutos. Por esto es normal que ninguno juegue más de 25 minutos por partido. Pero Fran ha dejado de ser aquel chaval que no quiso ir a la NBA para fichar por el Girona y ahora ya sabe que no sirve para nada tener la etiqueta de crack si sobre el parquet no te comportas como tal, es por eso que cada minuto que le conceden lo exprime al máximo, y eso es lo que le hace tan grande. En un equipo lleno de estrellas, el que no lleva colgado el cartel de crack es el que sobresale por su regularidad. Chapeau Barça, y felicidades al jugador gallego, por fin el baloncesto ha reconocido el trabajo de Fran ‘the man’.

La verdad sobre el 'caso Di Stéfano'

Ayer mismo un buen amigo me dio un toque y me comentó que había leído de fuentes poco fiables una serie de informaciones sobre el frustrado fichaje de Di Stéfano por el Barcelona, allá en el año 53. Acto seguido me puse a indagar para saber realmente lo ocurrido y después de mucho buscar y contrastar información, obtuve un cúmulo de datos y explicaciones concordantes bastante razonables. Y eso me voy a dedicar a explicar hoy, porque creo que todos los futboleros hemos hablado alguna vez de este tema. Todo empezó en 1949, cuando una huelga de futbolistas provocó que el crack argentino emigrara a Colombia y fichara por Millonarios de Bogotá, dejando atrás a River Plate. En esa época, la liga colombiana tenía a los mejores futbolistas sudamericanos fichados a precios exorbitados por unos cuantos ricos que crearon la Asociación colombiana, una institución paralela a la Federación colombiana de fútbol. Al verse desplazados estos últimos, recurrieron a la FIFA para que les ayudara a contrarrestar la falta de recursos económicos. Finalmente se firmó el Pacto de Lima, por el cual todos los jugadores fichados a golpe de talonario terminarían contrato con sus equipos actuales y volverían a sus clubes de origen a partir del 15 de octubre de 1954 sin poder ser traspasados antes. Unos años antes el Barça de las 5 copas había visto como su crack, Kubala, caía enfermo aquejado por una extraña patología a la que ningún médico conseguía encontrar cura, de manera que decidieron fichar a otro superclase, Di Stéfano. En 1953 el club catalán se fue a negociar con River Plate, quien a partir de 1955 tenía los derechos del futbolista, y pagó la mitad de su precio (2 millones de pesetas). Pero Millonarios de Bogotá denunció la situación a la FIFA (el jugador se había marchado de Colombia y declarado en rebeldía con el club). Millonarios le pidió casi 2 millones de pesetas al Barcelona para concederle la ficha federativa en el 53, pero el entonces presidente azulgrana Enrique Martí no aceptó. En ese momento entró el Madrid en el juego, y pagó al club colombiano la cifra que pedía por la ficha del jugador. Mientras tanto el futbolista se entrenaba con el Barça en la ciudad Condal y jugaba algunos amistosos, sin vestir la camiseta azulgrana por miedo a una sanción por parte de la FIFA. El máximo estamento futbolístico delegó su decisión a la Federación Española de fútbol y éstos acabaron decidiendo que el jugador jugaría las temporadas 53-54 y 55-56 en el Real Madrid y los cursos 54-55 y 56-57 en el Barça. El gobierno aprobó tal decisión pero el Barça se negó a compartir un jugador con el rival y la directiva del club dimitió en pleno. Una junta gestora con el expresidente azulgrana Agustí Montal al frente, entabló conversaciones con el Madrid y les ofreció los derechos del jugador a cambio de los 2 millones de pesetas desembolsados por él. Hubo acuerdo y Di Stéfano se vistió de blanco por primera vez el 23 de septiembre de 1953 en un partido frente al Nancy. El resto de la historia es conocida. Todo esto es lo que he podido sacar en claro de lo ocurrido, pero me quedan muchas, muchísimas dudas. Algunos historiadores dicen que el Barça negoció mal porqué se dirigió al club equivocado. Otros dicen que Franco intervino para llevarse al jugador a la capital. Y los hay que afirman ambas cosas. La verdad es que no se qué pensar, pero como ya he dicho, es un tema al que le veo muchas lagunas. Por ejemplo, si el Pacto de Lima declaraba que no se podía traspasar a ningún jugador hasta el día 15 de Octubre de 1954, ¿Por qué debutó con el Madrid en Septiembre del 53 en calidad de traspasado? ¿Por qué el Barça obtuvo la mitad de sus derechos también en el 53? Ahí os dejo la información puramente objetiva, que cada uno saque sus conclusiones.

¡Al loro!

“¡Muchas críticas vienen de hipócritas que dicen que son del Barça y no lo son! Y me están embaucando algunos de ustedes ¡Y eso es lo que no me gusta!”. Aunque cada día que pasa me gusta menos Laporta, no puedo evitar suscribir estas palabras, muy conocidas por cierto, que dijo el 6 de abril de 2008 en una 'trobada' de peñas azulgrana en Hospitalet. Iré al grano. Es realmente penoso y deplorable que, después de 55 puntos en 22 jornadas, de 17 victorias y de 21 partidos de Liga invicto, cuando se pierde el primer partido de Liga ya se este cuestionando ¡incluso el trabajo de Guardiola! Encuentro lamentable que después de la primera derrota en Liga salgan todos los “hipócritas” de los que hablaba Laporta a tirar mierda encima del equipo. Sí, esos que dicen que son del Barça y no lo son… o sí, porqué desgraciadamente hay muchos que sí lo son y no por ello se cortan un pelo a la hora de cargar contra su equipo, su entidad, su club. Y es que me parece lamentable y me revienta oír, ayer mismo literalmente, que “Guardiola ha destrozado al Barça”. ¡¿Estamos locos o qué pasa?! ¿Se pierde el primer partido de Liga en la jornada 22 y el técnico que nos ha llevado a ganar 6 títulos en un solo año ya se convierte en el diablo en persona? Un poquito de cordura señores, o en su defecto un poquito menos de mala fe. Porqué empiezo a pensar que esto ya no es el espíritu negativo del culé sino gente que actúa con premeditación para hacer daño. No tiene lógica ninguna dudar de este equipo como se esta haciendo desde hace un par de semanas. Por poner otro ejemplo, y aunque este caso ya viene de más lejos, ahora hay muchísima gente que ve como el error más grande de la historia del club el cambio de Eto’o por Ibrahimovic. Lo mejor del caso es que muchos de los que ahora dicen esto son los mismos que criticaban al camerunés cuando aún militaba en las filas del Barça y le querían fuera por ser demasiado problemático. No podemos permitir que este tipo de comentarios y afirmaciones sectarias nos causen la más mínima duda respecto a nuestro equipo. Si ahora que estamos viviendo una época dorada ya salen los carroñeros, ¿qué pasará cuando las cosas dejen de ir bien? No quiero ni imaginarlo. Por el momento me limitaré a hacer cuanta campaña pueda en contra de estos ¿barcelonistas? que solamente saben sacar pecho a la hora de criticar a su propio equipo. Y desde aquí os pido que no os dejéis llevar por las opiniones sensacionalistas que os puedan llegar, este equipo tiene cuerda para rato.

Voto de confianza a Henry

Ante el Getafe, Henry se sentó en el banquillo por accidente, pues su sitio debía ser la grada (por decisión de Pep) pero la lesión de Alves en el calentamiento previo al partido hizo que el mister debiera completar la lista de los 18 convocados con el francés. Muchos periodistas y entendidos del fútbol han considerado esto un toque de atención de Guardiola hacia su pupilo debido a su bajo rendimiento –dicen- en los últimos partidos. Soy un acérrimo defensor de Henry, sigo creyendo que aún puede dar mucho fútbol a este Barça y me revienta ver y oír cada día, ya sea en los medios, en las redes sociales de internet o en las tertulias entre amigos y conocidos, que se critica al jugador y se le da por acabado como futbolista. Cierto es que tan solo lleva dos goles en toda la temporada y que la eclosión de Pedro –otro día hablaremos de este fenómeno- le ha hecho muchísimo daño por las comparaciones que ha generado, pero sigue siendo Henry y no solamente aporta goles al equipo. Es más, aún sin estar fino de cara a puerta, lleva unos últimos partidos a gran nivel. Crea espacios en ataque, abre el juego por su banda, presiona como el que más la salida de balón del rival, se entiende de maravilla con Abidal y cuando ha jugado con Maxwell y baja a ayudar en defensa hasta el minuto noventa si es necesario. Por esto no me gusta que se le critique. La gente solamente se fija en las estadísticas, que si bien están ahí para algo, muchas veces nos engañan sobremanera porqué no muestran los intangibles del juego. ¿Quien no recuerda a Phillip Cocu? No era un jugador espectacular ni vistoso, pero era un pulmón para el equipo, hacía el trabajo sucio en el medio campo y se erigió como un gran líder en el vestuario. Pues con Henry pasa algo parecido, y el partido ante el Inter en el Camp Nou fue la prueba fehaciente de que a falta de gol, aporta trabajo físico y movilidad al equipo. Pues bien, parece ser que, como viene siendo habitual, no vemos más allá de nuestras narices, y si en la jornada 21 de Liga no nos plantan un número de dos dígitos y nos dicen “estos son los goles que lleva Henry” todos criticamos al jugador en masa, como si fuéramos un rebaño de ovejas siguiendo al pastor allá donde va. Seamos un poco inteligentes y no nos dejemos llevar por lo que dice el colectivo, que Henry ya nos demostró una vez que puede ponerse las pilas y volver a ser determinante de cara a portería. Por una vez en la vida, que sea positivo el convertirnos en ovejas descarriadas.

¡Qué taconazo!

No, no hablo de la jugada más vista de la jornada 20 de la Liga BBVA. El título del post de hoy no quiere referirse al pase de gol que dio Guti en el Deportivo - Madrid del domingo, pero si le dedica un guiño un tanto sarcástico si queréis. El taconazo del que hablo es el de Javi Rodríguez en al final del europeo de fútbol sala. Un golazo en toda regla. Y os preguntareis porque de golpe le dedico dos entradas al fútbol sala cuando no habíamos hablado aún de este deporte en el tiempo que lleva el blog en funcionamiento. Pues no lo sé, la verdad. Ni descubro ahora el fútbol sala, ni descubro ahora a Rodri, pues hace años que intento seguir la actualidad de este gran deporte que está en alza. Simplemente ha dado la casualidad que los hechos me han llevado a querer escribir sobre el Europeo de Hungría de fútbol sala dos veces seguidas. En este último caso he tardado un par de días en decidirme, y lo que ha hecho que saliera de dudas y empezara a teclear han sido unas declaraciones del seleccionador español de fútbol sala José Venancio en las que decía que el taconazo de Javi Rodríguez es más importante que el de Guti. Pues estoy totalmente de acuerdo. Lo del jugador merengue es una genialidad, sí, pero nada más. Un detalle bonito en un partido flojo -sobretodo por parte del Deportivo, no quiero quitar méritos al Madrid- en el que delante del portero sorprendió a todos dejando el balón atrás para que su compañero Benzema anotase el segundo tanto del encuentro. Pero la acción de Javi Rodríguez, dejando de lado que su taconazo acaba directamente en gol superando a un defensa y al meta portugueses, es la culminación a una carrera soberbia, la guinda a la actuación de un jugador que jugaba su último partido con la selección española de fútbol sala y que levantó el título de campeón de Europa, erigiéndose además, máximo goleador del torneo. Por todo esto creo que hay una jugada muchísimo más remarcable que otra. Pero, ¡Oh, cosas de la vida! aquellos que tanto alardean de hispanidad y patriotismo parece ser que se han olvidado de su país y no ven más allá de su club. Nadie habla de la consecución del Europeo de fútbol sala ¿por qué? Pues porqué se ve que hay una acción en un partido de Liga mucho más importante para ellos que la victoria de su país. No quiero defender el patriotismo ni tampoco atacarlo, me mantengo al margen de eso, pero lo que realmente me fastidia es la disparidad de criterios con que la gente trata unos temas u otros si ve sus intereses cruzados. Es decir, que cuando no hay nada remarcable que explicar o el eterno rival ha ganado algo, entonces somos españoles y buscamos cualquier noticia de la roja para poner en portada. Pero cuando un jugador de su club crea una pequeña maravilla en un partido con relativa importancia, nadie se acuerda que hay una selección española que ha logrado ser campeona de Europa, otra vez, con un gran capitán al frente que cuelga la elástica roja dejando el mejor sabor de boca posible. Eso es lo que realmente me cabrea, pero al fin y al cabo supongo que siempre ha sido y será así. Cada uno habla de lo que quiere, así que no voy a ser menos: ¡Bravo campeones!